Lograrlo
depende de qué tan cuidadoso sea con el seguimiento de las siguientes pautas:
1. Defina su negocio y estrategia:
Es
recomendable que los nuevos empresarios delimiten su negocio a partir de las
necesidades que satisfacen con los productos y servicios que ofrecen.
Después de entender su idea empresarial
es prudente establecer una estrategia que contenga las ventajas competitivas
que garantizan la preferencia de los clientes.
2. Desarrolle el talento:
Las empresas que perduran tienen la
habilidad de atraer y retener al mejor recurso humano, de forma que se alcance
el compromiso y la alta productividad.
3. Sea una organización que aprende:
Es de gran valor aprender, evolucionar,
innovar y progresar permanentemente en un mundo que se caracteriza por ser
cambiante y exigente.
Así, el aprendizaje se constituye en una obligación y resulta recomendable la
incorporación de conocimiento y nuevas tecnologías.
4. Atienda primero a su demanda
natural:
De
acuerdo con los expertos está demostrado que la sofisticación de la demanda
interna y la satisfacción de la misma es una de las mejores bases para ser
competitivos y eficientes. Por tanto será útil concentrarse en su mercado más
próximo.
5. Preste atención a los cambios en los
gustos de los clientes:
Los
hábitos de consumo se modifican frecuentemente y lo que hoy tiene demanda,
mañana no, aseguran los especialistas.
Quien
no ajuste sus procesos, recursos y oferta a las exigencias que surgen
probablemente quedará por fuera del mercado.
6. Conozca la competencia:
Es
imprescindible conocer quiénes son sus competidores, qué hacen, cómo y para qué
lo hacen. Así podrá establecer una posición clara frente a la competencia, ya
sea de ataque, defensa o alianza.
No olvide que seguir estas
recomendaciones le podrá garantizar el sostenimiento de su empresa y la
productividad en el largo plazo.
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