El primer caso analizado termina con una moraleja;
el segundo caso, más breve, también y el tercero, brevísimo, llega a una
conclusión.
Caso 1:
Un hombre se va a dar una ducha en el momento en que su esposa está terminando de ducharse, y en ese preciso instante suena el timbre de la puerta de la calle. Después de unos segundos de duda, ambos deciden que ella irá a atender, por lo cual se envuelve en un toallón, va, abre la puerta y se encuentra con el vecino de al lado de casa. Antes que ella diga algo, el vecino le dice:
- Le doy cien mil pesos si deja caer la toalla al suelo. Ella piensa unos segundos, se decide, deja caer la toalla y queda en cueros frente al vecino. Después de unos segundos más, este mete la mano en el bolsillo, saca cien mil pesos, se los da, da media vuelta y se va. Aún confundida, cierra la puerta rápidamente, se envuelve otra vez en la toalla y regresa al baño a secarse el cabello. Cuando llega su marido le pregunta quien era el que había tocado el timbre.
- El vecino de al lado, respondió ella, y el marido le replicó:
- Que bien!, ¿te devolvió los cien mil pesos que le presté? Moraleja: Si usted comparte información crítica con sus asociados, principalmente sobre créditos y riesgos, evitará exposiciones indeseables.
Caso 2:
Un cura va manejando su auto, cuando ve a una monja parada al costado de la ruta esperando transporte. El cura se detiene, le ofrece acercarla hasta el próximo pueblo y la monja acepta y pone su equipaje en el asiento trasero. Al subir en el asiento del acompañante, su hábito se abre un poco y deja ver una hermosa pierna. Cuando el cura lo advierte casi ocurre un accidente, pero él controla el auto aunque no resiste la tentación y al rato apoya su mano en la pierna de ella. La monja mira al cura y le dice:
- Padre, recuerde el salmo 129. El cura retira rápidamente su mano y pide disculpas confusamente pero sus ojos se resisten a dejar de mirar esa pierna, por lo que poco después su mano salta de la palanca de cambios, esta vez a la rodilla de la monja. Ante eso, la monja repite:
- Padre, recuerde el salmo 129. El cura, contrariado y contrito, pide disculpas y trata de explicarse: ...la carne es débil, hermana. Llegados a destino, ella mira al cura significativamente mientras toma su bolso y le agradece el favor de haberla acercado. El cura sigue su viaje y cuando llega a su destino corre a ver qué dice el salmo 129: ".....Sigue adelante e inténtalo, encontrarás la gloria.." Moraleja: esté informado sobre su trabajo o perderá grandes oportunidades.
Caso 3: (basado en una encuesta del FMI)
Usualmente los ejecutivos junior y empleados juegan al fútbol. Los gerentes de nivel medio juegan al tenis y los directores del más alto nivel generalmente juegan al golf. Conclusión: A medida que se sube en la escala empresarial las pelotas reducen su tamaño.
Caso 1:
Un hombre se va a dar una ducha en el momento en que su esposa está terminando de ducharse, y en ese preciso instante suena el timbre de la puerta de la calle. Después de unos segundos de duda, ambos deciden que ella irá a atender, por lo cual se envuelve en un toallón, va, abre la puerta y se encuentra con el vecino de al lado de casa. Antes que ella diga algo, el vecino le dice:
- Le doy cien mil pesos si deja caer la toalla al suelo. Ella piensa unos segundos, se decide, deja caer la toalla y queda en cueros frente al vecino. Después de unos segundos más, este mete la mano en el bolsillo, saca cien mil pesos, se los da, da media vuelta y se va. Aún confundida, cierra la puerta rápidamente, se envuelve otra vez en la toalla y regresa al baño a secarse el cabello. Cuando llega su marido le pregunta quien era el que había tocado el timbre.
- El vecino de al lado, respondió ella, y el marido le replicó:
- Que bien!, ¿te devolvió los cien mil pesos que le presté? Moraleja: Si usted comparte información crítica con sus asociados, principalmente sobre créditos y riesgos, evitará exposiciones indeseables.
Caso 2:
Un cura va manejando su auto, cuando ve a una monja parada al costado de la ruta esperando transporte. El cura se detiene, le ofrece acercarla hasta el próximo pueblo y la monja acepta y pone su equipaje en el asiento trasero. Al subir en el asiento del acompañante, su hábito se abre un poco y deja ver una hermosa pierna. Cuando el cura lo advierte casi ocurre un accidente, pero él controla el auto aunque no resiste la tentación y al rato apoya su mano en la pierna de ella. La monja mira al cura y le dice:
- Padre, recuerde el salmo 129. El cura retira rápidamente su mano y pide disculpas confusamente pero sus ojos se resisten a dejar de mirar esa pierna, por lo que poco después su mano salta de la palanca de cambios, esta vez a la rodilla de la monja. Ante eso, la monja repite:
- Padre, recuerde el salmo 129. El cura, contrariado y contrito, pide disculpas y trata de explicarse: ...la carne es débil, hermana. Llegados a destino, ella mira al cura significativamente mientras toma su bolso y le agradece el favor de haberla acercado. El cura sigue su viaje y cuando llega a su destino corre a ver qué dice el salmo 129: ".....Sigue adelante e inténtalo, encontrarás la gloria.." Moraleja: esté informado sobre su trabajo o perderá grandes oportunidades.
Caso 3: (basado en una encuesta del FMI)
Usualmente los ejecutivos junior y empleados juegan al fútbol. Los gerentes de nivel medio juegan al tenis y los directores del más alto nivel generalmente juegan al golf. Conclusión: A medida que se sube en la escala empresarial las pelotas reducen su tamaño.
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