Un paisaje de colores que van desde el pálido amarillo hasta el rojo intenso es la bienvenida que le da al turista este lugar situado hacia el norte de Chile. Se trata del más árido de todo el planeta, donde hay sectores en los que no ha llovido por más de 300 años. Sin embargo, entre enero y febrero la zona se ve afectada por el invierno boliviano y se produce alguna que otra lluvia y tormentas eléctricas.
Es en este lugar que se encuentra el poblado de San Pedro de Atacama, sitio que se ha convertido en el centro de partida de la actividad turística y de las excursiones de la región. Por allí inician sus recorridos los cientos de europeos que todos los años van a conocer el paisaje hostil y abrumador del desierto.
San Pedro se caracteriza por ofrecer variados servicios a los turistas como alojamiento, restaurantes, agencias de turismo, venta de artesanías, centros de llamados, acceso a Internet, entre otros. El lugar también es frecuentado por aficionados a la astronomía, ya que por las características atmosféricas hay posibilidades de contemplar muy bien los astros.
El paisaje se ve adornado por vicuñas, llamas, caballos, vacas y otros animales domésticos, así como por los flamencos que se alimentan de las aguas del salar de Atacama, las mismas que se utilizan para producir, entre otras cosas, aluminio, vidrio y dos tercios del litio que se usa en el mundo. Por eso, si está escogiendo a dónde viajar, esta es una alternativa interesante.
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