Envíanos tus artículos a enpazyarmonia@gmail.com.
Google Ads
LA ZORRA Y EL LEÑADOR
Una zorra estaba siendo perseguida por unos cazadores cuando llegó al sitio de un leñador y le suplicó que la escondiera.
El hombre le aconsejó que ingresara a su cabaña.
Casi de inmediato llegaron los cazadores, y le preguntaron al leñador si había visto a la zorra.
El leñador, con la voz les dijo que no, pero con su mano disimuladamente señalaba la cabaña donde se había escondido.
Los cazadores no comprendieron las señas de la mano y se confiaron únicamente en lo dicho con la palabra.
La zorra al verlos marcharse, salió sin decir nada.
Le reprochó el leñador por qué a pesar de haberla salvado, no le daba las gracias, a lo que la zorra respondió:
-“Te hubiera dado las gracias si tus manos y tu boca hubieran dicho lo mismo”
No niegues con tus actos lo que pregonas con tus palabras.
Fábula de Esopo
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, escriba aquí sus comentarios