Google Ads

TODA UNA EJECUTIVA



Tu forma de tratar a los demás y los aportes que das para una sana convivencia fuera y dentro de la empresa resultan vitales para ser un buen empleado

Seguramente te has preguntado mil veces: ‘
¿Qué pasó con los buenos modales de mis compañeros?’
¿Consideras que anteriormente la gente se esforzaba por ser más educada?
¿Has llegado a pensar que las buenas maneras en tu empresa están en peligro de extinción?

Las interacciones en un ambiente laboral suelen ser tomadas a la ligera por muchos, pero la realidad es que estas afectan radicalmente la vida profesional.

Con buenas actitudes y buena comunicación son la clave para mantener buenas relaciones con los demás sin perder el sentido del humor ni la autoestima y con la reputación en alto.

Ayudas para sortear toda clase de situaciones cotidianas.

Si escuchas un chisme o un comentario negativo sobre ti en boca de tus compañeros de trabajo, ¿debes enfrentarlos? ¿Qué posición tomar?
Ten siempre presente que los comentarios de pasillo en ambientes laborales y sociales son cuestión del día a día. La mejor posición es ignorar las palabras y actitudes de los demás”. (No guardes rencor, siempre da lo mejor de ti pase lo que pase.)

¿Cuál es la reacción más adecuada ante un grito de tu jefe o jefa?
“¡No lo tomes como algo personal! Una persona grita cuando se siente incapaz de comunicar o solucionar situaciones de inmediato”. (Pero nunca le devuelvas el grito ni alces el tono de voz en la oficina.)

Si cuentas un chiste y terminas ofendiendo o hiriendo a alguien, ¿cuál es la mejor opción para enmendar la falta?
Presentar excusas inmediatamente. Lo ideal es siempre conocer el entorno en donde estemos antes de hacer cualquier broma”. (Pero procura que no se excedan las jocosidades para no crear un mal ambiente.)

Si una compañera tiene mal aliento o la gente se burla de su maquillaje, ¿deberías decirle?
¡Mucho cuidado! Estas son situaciones que generan gran susceptibilidad. Si tal persona no es de tu confianza, no se lo digas. Pero si tienes una estrecha relación laboral o social, se lo haces saber, eso sí, con mucha delicadeza y en privado.

¿Qué hacer cuando olvidamos el nombre de un compañero de trabajo y estamos a punto de presentarlo a otra persona?
Una buena opción, antes que pasar el chasco de preguntarle, es empezar por hacer referencia del cargo y darle así la palabra a esta persona. Una vez empiece a presentarse, procurar recordar su nombre y luego utilizarlo en algún momento y así hacerle ver que lo sabes.

La clave es ir adquiriendo y reforzando virtudes como la responsabilidad y la prudencia, y también dar la talla en el día a día laboral.

Tu imagen no tiene que estar al último grito de la moda, pero sí siempre muy bien arreglada y, aunque sobre decirlo, esto incluye nuestra higiene personal.

Procura que con tus atuendos prime la discreción. (La primera impresión dice mucho de ti y para ello debes ser constante: todos los días conoces a alguien nuevo. ¡Ah! Y que no se te vaya la mano en el perfume.)

¡No contestes el teléfono como si estuvieras en tu casa! ‘Aaaaló’ no es la forma ideal para hacerlo. En la mayoría de empresas suelen empezar con el nombre mismo de esta y agregándole un ‘buenos días’. Y recuerda siempre ser muy cordial y diligente, nunca se sabe quién estará al otro lado de la línea.

Encuentro fuera de la oficina
Sea desayuno, almuerzo, cena, y más si es para cerrar un negocio, debes ser concreta. A la otra persona seguramente no le gustará que le estés hablando sobre tu hija y los dos dientes que se le cayeron o si hay conflictos laborales en tu oficina. ¡Al grano! (Pero sobra decirlo, pero ¡no llegues tarde!)

No hables nunca mal de la empresa en la que trabajas
Eso es como denigarar del ‘ex’, habla peor de ti que de él o ella, en el caso de la compañía.

Regalos cumpleañeros
Este es un tema complejo, pero la mayor recomendación es intentar que el detalle no sea demasiado personal (ropa interior, perfumes, etc) a menos que conozcas muy bien a la persona y no le resulte ofensivo.

¡Deja huella!
Una ejecutiva moderna debe ser decidida y muy segura a la hora de hablar con alguien nuevo. Siempre ten a la mano tus tarjetas con tus datos completos. No habla muy bien de ti el anotar tu nombre y teléfono en un pedacito de papel amarillento. (Para ampliar tu agenda pide siempre los datos de la otra persona.)

Vía e-mail
Nada de mandar besitos a clientes o a gente que acabas de conocer. A menos de que sean amigos, tu relación con ellos debe ser cordial, pero distante.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Por favor, escriba aquí sus comentarios

Gracias por su visita.

EnPazyArmonia